Obreros que no votan


Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, ha firmado los aranceles aduaneros sobre el acero rodeado por obreros siderúrgicos, con mono y casco. Tomamos nota de ello, para hoy y para mañana. Sin una conciencia comunista y sin una estrategia, nuestra clase siempre será utilizada e instrumentalizada por los intereses ajenos. La ideología dominante es la de la clase dominante, y esto vale para todas las ideologías, de todo tipo: reformistas y progresistas, por cierto, como en la tradición socialdemócrata del partido obrero burgués, pero también conservadoras, de seguridad, o xenofobias y "populistas", como está de moda ahora. 
En la actualidad, desde hace algún tiempo, en cada elección, por pereza mental o por cálculo, circula un cuentecito de conveniencia: la mayoría de los obreros, asusta­da, estaría ya de parte de los "populistas" y de sus representantes, que pueden ser desde Trump, a los soberanistas del Front National en Francia, a los nacionalistas del Brexit en Gran Bretaña, de la Lega o de los Cinco Estrellas en Italia. 
No nos hagamos ilusiones, contrastaremos también estas influencias, así como lo hicimos con el oportunismo. Sin embargo, no es verdad que tengan la mayoría. Por ejemplo, en Italia. Primero, entre todos los asalariados, el primer partido es la abstención. En segundo lugar, es precisamente entre los obreros que su cuento es falso. Basándonos en los datos, si se acude a los grandes barrios obreros de Génova, Milán o Turín, por cada uno que se ha hecho el selfie en el mercado con Malteo Salvini o dos con Luigi Di Maio, encontrará cuatro o cinco que no han votado. Por cierto, a los obreros y a los proletarios hay que contarlos todos: también los 350 mil inmi­grados que trabajan en la fábrica, los 200 mil en la construcción, los 500 mil en la logística, en los hoteles o en las cocinas de los restaurantes, los 800 mil - ¿o un millón'! ¿quién sabe?- entre asistentas y cuidadoras. Hombres y mujeres que en Italia viven y trabajan pero no tienen los mismos derechos que los italianos y, por lo tanto, no votan. Seamos claros, somos revolucionarios y estamos en contra de la política burguesa, su política, pero no así. Todos tienen que tener los mismos derechos, es un interés fundamental de clase, también el derecho al voto: luego explicaremos a todo el mundo que el parlamentarismo es un engaño, y nos batiremos por conquistarlos a nuestra política, la política comunista.

Estrasburgo analizará la demanda de los pensionistas

Estrasburgo analizará la demanda de los pensionistas por su falta de poder adquisitivo en vísperas de otra manifestación.
Zaragoza la ya conocida “marea gris”, el colectivo de pensionistas de nuestro país está más activo que nunca. 

Estrasburgo analizará la demanda de los pensionistas por su falta de poder adquisitivo en vísperas de otra manifestación.

En vísperas de una nueva manifestación general de la “marea gris” el próximo 15 de abril, hemos sabido que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos admitía a trámite la demanda interpuesta por Colectivo Ronda en representación de Domiciano Sandoval, activista y portavoz de la Marea Pensionista, contra la decisión de España de revalorizar las pensiones por debajo del incremento del coste de la vida y desvincular las revisiones del importe de las pensiones de la evolución del IPC mediante la aplicación del denominado «índice de revalorización de las pensiones».

Según datos facilitados por la propia Curia Europea, sólo el 5% de las demandas elevadas frente al Tribunal de Estrasburgo denunciando vulneraciones del Convenio Europeo de Derechos Humanos son admitidas a trámite y terminan siendo resueltas por el TEDH. Tras esta admisión se espera que en el plazo aproximado de un año se dé a conocer el fallo de este tribunal.

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) se pronunciará sobre la pérdida acumulada de poder adquisitivo que sufren los pensionistas españoles desde el año 2012 como consecuencia de la decisión de actualizar el importe anual de las pensiones en un porcentaje inferior al incremento del coste de la vida. Práctica que a criterio del Colectivo Ronda supone una vulneración del deber «de elevar progresivamente el nivel del régimen general de la Seguridad Social» y no garantiza la exigida «suficiencia económica» a los pensionistas.
Así lo demuestran, por ejemplo, unos datos hechos públicos por el sindicato UGT que señalan que los pensionistas españoles han perdido de media 670 euros al año en términos de capacidad adquisitiva durante el período comprendido entre el año 2010 y 2017.